No hagas caso ¿cómo te va?
ven, déjame abrazarte y ya después me dirás
siempre hay tiempo, mentira
la dicha se va en tantas formas, y te fuiste tú, y el verte de nuevo me inunda
de gratitud, de ventura, de felicidad
la vida un día toca a la puerta,
nos manda llamar,
como hojas que el viento separa y
después de algún tiempo las junta
las vuelve a encontrar
no caben rencores, la cosa es así
lo único que quiero mirar
es que estás otra vez junto a mí.
Uno no sabe qué decir, la ocasión
amerita una celebración de emociones
de hablar y escuchar, ¿qué te puedo contar?
Sí, no sé por donde empezar.
Te puedo abrazar ya estás aquí
es tu bienvenida y yo soy tan feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario